Durante el confinamiento, la presión y la tarea lobbista de la Coordinadora per l’Abolició dels Correbous de Catalunya (CACC) ha contribuido a que los municipios taurinos de Cataluña hayan tomado la decisión definitiva de no realizar correbous esta temporada. Sorprende el numeroso colectivo de concejales y alcaldes que querían correr el riesgo sanitario del coronavirus y celebrar actos taurinos sin pensar en la salud y bienestar de sus conciudadanos, cediendo al chantaje de los ganaderos. Si hubieran decidido hacerlos, nos hubieran tenido allí in situ para documentarlo todo, ésta fue la advertencia que entendieron por encima de la cuestión ética relacionada con la tortura infligida a los toros y la sanitaria. Era jugársela demasiado con las cámaras de la CACC por allí, espetó más de un cargo público.
Y es que la CACC arrancamos la nueva temporada taurina el pasado mes de abril con las cámaras y los investigadores preparados para proseguir con la tarea de documentación ininterrumpida que llevamos realizando desde 2013 a pesar de todo hiciera prever que la pandemia del coronavirus impediría los primeros linchamientos públicos de toros como el de Aldover.
La acción política de la Coordinadora tampoco se ha detenido, pues hemos seguido manteniendo reuniones y conversaciones con miembros del Gobierno, diputados del Parlamento, alcaldes y concejales.
Este 2020, el trabajo de campo se ha centrado más en la investigación y el análisis de datos pertenecientes al espectro económico que sostiene la tauromaquia catalana, es así como se han podido obtener datos muy valiosos que haremos públicos cuando llegue el momento de hacerlo.
Esta pausa también ha servido para poder editar el centenar de horas de grabaciones y para la recopilación de los artículos de opinión facturados por nuestros portavoces.
Desde la CACC queremos agradecer el apoyo recibido de la Taula Animalista de Catalunya, ya que nos ha ayudado con el lobby más allá del Parlamento, por lo que pudimos mantener una reunión con el consejero Calvet del Gobierno de la Generalitat para presentarle nuestro bagaje activista.
La convulsión política catalana no permitirá avanzar en esta legislatura hacia la ansiada abolición de los correbous y el fin de la tauromaquia, pero no vamos a permitir que transcurra más tiempo sabiendo que la mayoría absoluta de la población se muestra favorable a la abolición de los linchamientos a los toros, es por eso que si el próximo Gobierno no se dirige diligentemente hacia suprimir la excepción a la ley, no dudaremos en continuar con la ILP iniciada y una intensificación de la presión política.
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#StopCorrebous
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#TauromàquiaPuntFinal
